sábado, noviembre 17, 2007

Por respeto a los constantes

Superados los inconvenientes técnicos por medios cuasimágicos, nos vemos obligados a esgrimir inconvenientes de otra índole, más tirando a lo metafísico, para confirmar las sospechas de los irrisoriamente fieles lectores*: la mítica frecuencia de actualización de Lo terrible ha pasado a mejor vida, al menos en tanto La fruta siga sintiéndose así de viva en otros foros.

De cualquier modo, superado así, a los ponchazos, el trauma de escribir algo después de tanto tiempo, lo más probable es que vuelva cual tromba en un par de días.






*Si entre ellos estás vos, Adrián Suar, devolveme mi mesa.