jueves, mayo 17, 2007

¿Saña?

No voy a renegar de lo último.

Empero: incendiar los corazones de los trabajadores subterráneos... todo para que el chofer del 92 tenga que tomar una ruta convenientemente panorámica, que me llevó por varios pasados, algún que otro presente y, ¿para qué?, ciertos futuros posibles (en otras continuidades, claro)...

¿Te parece a vos?

Universo, tirame un hueso de vez en cuando. No pido mucho.

Gracias.